martes, 27 de mayo de 2008

CXLVII

Ya es medianoche
Pero qué me importa...
Tardaste tanto, musa,
¿Para qué voy a despedirme pronto?
Déjame lamer tus senos
Con lengua pentasilábica,
Déjame perforar tu piel a besos,
Hoy quiero escuchar tu gemido polifónico
Mientras nos embriagamos
En orgasmo mutuo, Musa,
Y usarás el cristal de tus manos
Para guiar mi mano trémula sobre el papel
Sea pincel sea pluma sea lo que sea
Usarás el calor de tus labios
Para encender
Para encenderme
Aflora la imagen en mi mente

Ya es medianoche,
Y a mí no me importa,
Musa,
Rociaré de amor tus montañas

Musa,
Electriza mi piel con tu boca
Brotará la savia creadora
Te amaré te esculpiré
Olvidarás la hora
Seré siempre tuyo, musa,
En este pentagrama.

David Alberto Campos V, Ópera Cromática, 2005

No hay comentarios: